—Unas Llaves

Muy de vez en cuando, no siempre, pero de vez en cuando la burocracia sirve para cementar momentos importantes.

Nosotros, sin duda, nunca nos vamos a olvidar del día en el cual firmamos el alquiler de nuestro primer local.

En ese barrio especial, en esa esquina soñada por la cual pasamos caminando un día y decidimos que era el lugar en donde queríamos formar nuestro nuevo hogar.

Las obras (como bien te hace saber cualquiera con quien te cruzas) se hacen muy largas, mucho más largas de lo que esperamos. Sin embargo ese momento en el cual entras por primera vez, en cual trabajas por primera vez, en cual recibís clientes por primera vez…

Esa sensación, ese pequeño – gigante momento no se puede describir. No se puede poner en palabras.